El seis veces campeón mundial Max Biaggi será un embajador global para Aprilia, un rol al que se adaptará sin ningún problema dados los múltiples capítulos que Max y Aprilia han escrito juntos en la historia del motociclismo, pero que ahora se ha hecho oficial.

Gracias a las incontables victorias logradas a bordo de las motocicletas del fabricante de Noale, Max Biaggi ha contribuido como nadie a proyectar a la cima la marca Aprilia. Su historia (una de gran pasión), talento y amor por el trabajo han ayudado a Aprilia a convertirse en uno de los fabricantes más exitosos del mundo en la historia del motociclismo deportivo, con un palmarés que actualmente incluye 54 títulos mundiales.

Max Biaggi es el embajador ideal, uno que personifica el ADN deportivo de Aprilia; pero no solo eso, ya que el campeón italiano también hará una importante contribución conforme Aprilia encare los múltiples desafíos que hay por delante, ofreciendo su experiencia para promover la marca, su tradición deportiva y sus productos.

“Nuestras historias se entrelazan una vez más en un momento muy importante para Aprilia. Como entusiasta, he podido apreciar el progreso del proyecto de MotoGP, el cual muestra un potencial muy interesante”, comentó Max Biaggi. “Estoy orgulloso -y confiado- de poder ofrecer mi experiencia para apoyar a una marca 100% italiana mientras continúa su crecimiento, tanto en términos de su espíritu de carreras como de sus nuevos productos que harán gala, como siempre, de ese carácter deportivo de Aprilia”.

Max Biaggi debutó con Aprilia en el Campeonato Mundial de 250cc de 1991. El título de 250cc que ganó en 1994 fue el primero de un excepcional triplete en el que dominó el serial a bordo de la moto italiana hasta 1996. En ese momento, los caminos de Aprilia y Max se separaron hasta 2009, cuando Biaggi subió a bordo de la Aprilia RSV4 en el regreso del fabricante de Noale al Campeonato Mundial de Supermoto (WSBK por sus siglas en inglés).Aprilia nunca había ganado el título de WSBK pero era justo lo que pretendía con la futurista RSV4. Su intento de triunfar en un serial reservado para motores de cuatro tiempos de alto rendimiento tuvo éxito y Max rodó a la victoria la V4 italiana en su temporada debut antes de dominar el serial en 2010 y 2012, ganando los títulos de Pilotos y Constructores. Él se retiró de las pistas tras obtener el campeonato de 2012, ganando seis títulos mundiales a lo largo de su carrera, pero las pistas lo llamaron nuevamente para un breve regreso en 2015. Entrando como comodín en la carrera de Malasia del WSBK, logró subir al podio en el circuito de Sepang; confirmando, a los 44 años de edad, tanto su talento como un campeón como la competitividad del proyecto Aprilia RSV4.